El Ozempic, el remedio que se utiliza para tratar la diabetes tipo 2 -la que no necesariamente necesita insulina para controlarse- está adquiriendo una importante repercusión pública porque se descubrió que sirve para adelgazar. Sin embargo, puede tener efectos secundarios que deben tenerse en cuenta, según explicó el médico toxicólogo Sergio Saracco.
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Saracco, quien además es jefe del Departamento de Toxicología de la provincia, explicó en Canal 7 qué efectos produce el Ozempic y destacó que tal y como sucede con todos los fármacos, no es inocuo sino que puede producir efectos tanto positivos como negativos en el cuerpo.
Lo que manifestó el profesional es que hay que considerar que los efectos positivos sean más que los adversos.
Para qué se sirve y qué produce el Ozempic
Según explicó Saracco, el Ozempic está compuesto por la sustancia semiglutida, que reduce los niveles de azúcar en la sangre al estimular la secreción de la hormona insulina y disminuir la de glucagón.
En general, se indica para personas con diabetes tipo 2 que no pueden ser tratadas con metformina, o que no toleran la combinación de medicamentos.
Viene en forma de lapiceras inyectables -similar a la presentación de la insulina para tratar la diabetes tipo 1- y cada caja contiene 12 dosis.
Lo que Saracco manifestó es que hay que tener en cuenta que si se la utiliza sin tener diabetes -es decir, la gente que la emplea solamente para adelgazar- puede producir una hipoglucemia, muy peligrosa para la salud.
Otros estudios han detectado la posibilidad que afecte a los riñones y al páncreas, pudiendo producir en casos extremos, pancreatitis. Otra posibilidad es que genere cálculos renales.
Pero entre los efectos secundarios positivos que se están estudiando, además de ser un medicamento efectivo para adelgazar, podría servir como tratamiento para el Alzehimer, lo cual no ha sido definitivamente comprobado.
La droga para la diabetes se vende solo con receta
Por más que se haya convertido en un remedio popular para bajar de peso, el Ozempic se vende solo bajo receta médica, por lo que quien realice el pedido del fármaco se hace responsable de recetarlo a una persona que no padece diabetes.
Saracco manfiestó que con el Ozempic pasa un fenómeno similar a lo que ocurrió con el Sildenafil, conocido como viagra o "la pastilla azul", si bien se creó para tratar un tipo de afección cardíaca, luego se detectó que tenía poder para combatir la impotencia sexual.
Como todos los fármacos, debe estar controlado por un médico que evalúe que sus efectos positivos van a ser superiores a los adversos para la persona que lo va a utilizar.
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