Noticias

miércoles, 14 de diciembre de 2022

7 motivos para no pasar a macOS si eres usuario de Windows

macOS es el sistema operativo de Apple, diseñado exclusivamente para funcionar en los equipos de este fabricante. Esto, a priori, ofrece muchas ventajas, ya que se trata de un sistema cerrado y optimizado para funcionar en un determinado hardware y con una configuración concreta, lo que le brinda seguridad y fluidez. Además, Apple cuida a mimo la apariencia de su sistema para que sea bonito y llamativo. Esto hace que muchos usuarios se sientan atraídos por él y decidan, al final, dejar Windows para darle una oportunidad. Pero esto no es siempre una buena idea.




Si llevamos mucho tiempo usando un sistema, es fácil que nos hayamos acostumbrado ya a él, con sus mases y sus menos. Y cambiar de un sistema a otro, ya sea de Windows a macOS, a Linux, e incluso de macOS a cualquier otro sistema puede llegar a ser un problema.


Que no te engañen: hay virus para macOS

Una de las razones por las que los usuarios deciden dar una oportunidad a este sistema operativo es porque, en teoría, no hay virus y no necesitan antivirus. Y esto está muy lejos de ser verdad. Para macOS, como para cualquier otro sistema operativo hay virus. Es cierto que es más complicado infectarnos con ellos si solo bajamos apps de la App Store, y si no ejecutamos nada bajado de Internet, además de que el número de amenazas para macOS es menor que el de Windows porque, igualmente, es un sistema con muchos menos usuarios.


Olvídate de tus programas

Cuando llevamos usando mucho tiempo un sistema operativo, es muy probable que nos hayamos acostumbrado a usar algunos determinados programas. Al cambiar de sistema, estos programas es muy probable que no estén disponibles debido a que los desarrolladores no han decidido lanzar sus programas para ellos. Muchos sí que tendrán sus correspondientes versiones para macOS, como Chrome, Word o Photoshop, pero si salimos del software estándar, es muy probable que ya no los tengamos.


Y, por supuesto, de los juegos

Además, si te gusta jugar en el PC, un Mac no es una de las mejores opciones. La lista de títulos disponibles para este sistema operativo es muy muy limitada. Más incluso que en Linux. Por tanto, si tenemos una buena biblioteca de Steam, ya podemos ir olvidándonos de ella. A parte de que los ordenadores Mac no llevan precisamente las mejores tarjetas gráficas.


No podrás actualizar tu PC

Cuando compramos un PC normal, si al cabo de unos años se nos queda algo limitado en potencia, siempre podemos cambiarle algunas piezas: un poco de memoria RAM por aquí, un poco de SSD por allá, nueva gráfica, nueva CPU… en el caso de un Mac, podemos olvidarnos.


Las posibilidades de ampliación de los equipos de Apple son muy limitadas, y todo se traduce casi a que, si el ordenador va mal, tenemos que cambiarlo y comprar otro, y no hay otra opción. Igualmente, las opciones de reparación son muy limitadas y nos volveremos a encontrar en la misma situación.


Hackintosh no es una opción

Algunos usuarios deciden colocarse en un punto intermedio entre estos dos casos y prueban a instalar macOS en un PC normal haciendo uso de lo que se conoce como Hackintosh. Y esto es un error. Instalar un Hackintosh es un proceso muy complicado, que requiere de un hardware y una configuración muy concreta, y que nos va a dar más problemas que alegrías. Además, el rendimiento y la fluidez típicas de Apple, que es lo que buscamos,  no van a estar presentes aquí.


Si no tienes iPhone y iPad, pierde sentido

Apple ha trabajado mucho para crear un ecosistema único, y esto tiene sus puntos fuertes y sus puntos débiles. De esta forma, si tenemos otros dispositivos del fabricante, estos van a funcionar a la perfección con macOS. Vamos a poder conectar todos los dispositivos al Mac, e interactuar con ellos teniendo una experiencia unificada. Pero, si no tenemos otros dispositivos, o tenemos, por ejemplo, un móvil Android, esta experiencia ya se rompe.


Prepara el bolsillo

Por último, cabe destacar que todos los productos de Apple son caros. MUY caros. Desde el hardware de comprar un nuevo Mac hasta el software o los servicios de suscripción. Es todo muy caro, y eso hace que, si tenemos algún problema, o tenemos (o queremos) que cambiar de equipo, la inversión se dispare.

No hay comentarios:

Publicar un comentario