Mendocinos de Generación Zoe se consideran víctimas y quieren mantener la empresa abierta

Hasta esta semana, algunos referentes mendocinos de Generación Zoe querían que la empresa siga operando, sin atender a las instrucciones que da por Zoom el fundador de la firma, Leonardo Cositorto. Pero la Inspección General de Justicia consiguió que se inhibieran los bienes de la compañía acusada de estafa y eso cambió todo.

Según pudo saber este diario, los principales promotores de Zoe en Mendoza ya consultaron a abogados locales para evaluar su situación.

Pero antes, el mismísimo Cositorto -que está prófugo de la Justicia argentina- llamó a un letrado de la provincia desde algún lugar de Latinoamérica para pedirle que averiguara si por estos pagos había alguna denuncia en su contra.

Que se sepa, en Mendoza todavía no hay nada que lo complique. Pero muchos de los que hasta el verano eran habitués de las oficinas ubicadas en la lateral sur de Acceso Este -cerca del Cóndor decapitado- analizan dar su propia respuesta a la coyuntura: quieren seguir.

"Cositorto no elegía a los referentes por currículum, sino porque evaluaba su capacidad de captación. En estas estafas piramidales, mientras más gente lleves más ganás. Entonces necesitás atraer", definió una fuente que sigue de cerca el día a día de Zoe Mendoza.

La firma ofrecía cursos de "coaching ontológico", "trading" y espiritualidad, solicitando a los estudiantes que aportaran a cambio fondos de 500 dólares o más.

Pero encima de las clases y los encuentros, Zoe prometía ganancias pingües: un 7,5% mensual en dólares, porcentaje que aumentaba en la medida en que a) se pusiera más dinero o b) se incorporara a más personas. Un típico esquema piramidal.

Cuando a fines de 2021 y principios de 2022 algunas advertencias de la Comisión Nacional de Valores (CNV) avisaron sobre el riesgo de colocar dinero en la firma, se desató la crisis. Los ahorristas se apiñaron en la sede de Ciudad de Buenos Aires; la organización se derrumbó y no pudo cumplir sus compromisos ni devolver plata.

Para entonces, Cositorto ya se había ido del país, sin dejar de participar activamente en las redes sociales. Desde la clandestinidad -con tono místico y powepoints algo chastrines- anticipó que Zoe cerraba y venía el tiempo de Sunrise Coach, su nuevo caballito de batalla que no tendrá oficinas físicas porque operará sólo por Internet:

Lo que probablemente no anticipó Cositorto es que se toparía con una especie de "rebelión" de referentes mendocinos.

"La idea que anda dando vueltas por Mendoza es mantener la empresa abierta y ver cómo se la puede reflotar. Es algo que se está analizando, porque acá Cositorto está prófugo pero hay mucha gente que laburó mucho", reveló otra fuente que defiende a los Zoe locales.

-¿Entonces hay líderes mendocinos que se consideran víctimas?

-Sí. Son personas que también pusieron plata y la perdieron, después de todo. Ellos vendían un producto que comercializaba Cositorto. Es más, yo no descartaría que los referentes de acá terminen denunciándolo a Leonardo por lo que hizo. Ellos simplemente eran buenos vendedores.

Zoe, ¿una empresa "recuperada"?

El golpe más duro contra Zoe vino de Villa María (Córdoba), donde se acumularon denuncias de afectados que querían recuperar su plata, lo que derivó en órdenes de captura y 15 detenciones.

En esa causa, Cositorto y su mano derecha -Maximiliano Batista-, están acusados y con pedido de captura, pero prófugos.

Entre tanto, a orillas de la coordillera transcurre una historia paralela, con algunos que se entusiasman con hacer que Zoe siga operando en Mendoza, aunque sin admitir a nuevos "inversores" para evitar que los acusen de perpetuar la estafa piramidal.

Afirman, de hecho, que la orden de cerrar la filial mendocina les llegó por Zoom y por parte de alguien que no era Cositorto. "Sobre el cierre no hay nada escrito", aseguran. O sea que Zoe podría convertirse en un salón de fiestas, un centro cultural o un club social. A esta altura, todo parece posible.

Por otra parte, quien asesora jurídicamente a los mendocinos comenta que habrá que revisar los estatutos de la empresa. "Muchas decisiones se tomaban entre socios: si hay muchos socios y algunos te dicen que cierres y otros que abras, ¿vos qué hacés?".

La decisión judicial que puede alterarlo todo

Todo este plan para que Zoe Mendoza siga operando sonaba más factible antes de que la Inspección General de Justicia -el ente que se encarga de regular el funcionamiento de las empresas- lograra la intervención de Zoe Capital y Generación Zoe, dos de las principales compañías del "holding" que también ofrecía autos usados, mascotas y hasta taxis aéreos.

Según consignan medios porteños, las causas están en el Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Comercial Nº14 y el juez a cargo es Pablo D. Frick, quien decretó la intervención de las firmas por seis meses a partir de esta semana.

Eso podría complicar el funcionamiento "autónomo" de la filial mendocina. Además, las autoridades inhibieron los bienes de Cositorto, que sigue con pedido de captura internacional.

Los "inversores" argentinos que pusieron su plata en Zoe en busca de rendimientos del 7,5% mensual en dólares siguen aguardando un milagro o, al menos, un plan de pagos que se cumpla. Pero su reclamo no tiene el suficiente eco en otros países, donde el fanatismo "zoístico" parece seguir intacto.

Por su parte, Cositorto sigue inspirando a sus fans cada tanto a través de la red. Jura que no se rendirá pero sigue refugiado en algún rincón del planeta.

Hace algunas horas, en efecto, envió un mensaje a los colombianos, en apoyo a uno de los candidatos para las elecciones del próximo 13 de marzo

Y, por supuesto, hay cientos que siguen depositando en él su dinero y su fe.